Una boca limpia y saludable transmite una sensación de cuidado e higiene y en definitiva, una buena percepción de los demás hacia ti. Pero lo más importante, una boca saludable es también un cuerpo saludable, ya que sabemos que algunas patologías pueden estar provocadas por una mala higiene o salud bucodental.
Nuestra boca es un punto de acceso a nuestro organismo, por eso es tan importante que la cuidemos, si queremos cuidar de nuestra salud en general. Fomentar ciertos hábitos es la mejor de las prevenciones y la mejor forma de mantener a raya tu salud dental. Muchos de ellos estás cansado/a de oirlos: cepillado, no fumar, no consumir azúcar… por eso nosotros queremos darte otros menos conocidos pero que sin duda, mantendrán tu salud bucodental.
Por supuesto, tenemos que decirte que, aunque sigas estos consejos, no te olvides de visitar a tu dentista para tus revisiones periódicas.
1. Bebe mucha agua
Beber al menos 1,5l de agua al día te ayudará a adelgazar, por ejemplo, pero también a hidratarte y a generar saliva. La saliva es la mejor barrera de protección que tenemos frente a la placa bacteriana, y equilibra el pH natural de la cavidad bucal, lo que nos ayuda y mucho a mantener una buena salud oral.
2. Mastica chicle (SIN AZÚCAR)
Como lo lees, los chicles sin azúcar también facilitan la producción de saliva y además, te ayuda con la limpieza mecánica de los dientes. Así que si un día no tienes con qué cepillarlos, lo mejor es que mastiques uno de estos chicles, pero eso sí, no lo tomes como norma. Lo mejor es que tu higiene se realice con cepillo e hilo dental, vamos, como siempre.
3. No te cepilles nada más terminar de comer
El pH idóneo de nuestra boca es del torno al 7,4, con lo cual es ligeramente alcalino. Cuando comemos o bebemos algo, el pH disminuye y se vueve más ácido, lo que puede provocar la demineralización de nuestros dientes, que nos provocaría caries, periodontitis y otras enfermedades de la boca.
Si nos cepillamos cuando este pH está ácido y atacando a nuestra dentina, lo único que haremos será repartir todo ese ácido por toda la boca y frotarlo con el cepillo contra los dientes.
Por tanto, te recomendamos que esperes al menos 30 minutos antes de proceder a tu cepillado dental después de las comidas.
4. Nada de morderse las uñas
Con el mal hábito de mordernos las uñas estamos cometiendo un doble pecado: introducimos bacterias en nuestra boca y, por lo tanto en nuestro organismo, y además al mordisquear continuamente erosionamos, sin darnos cuenta, nuestro esmalte, provocando microtraumatismos que pueden llegar a fracturarlos y provocar a largo plazo un aumento de la sensibilidad dental.
5. Usa cepillo eléctrico
Una de las claves para mantener nuestra salud bucodental es el cepillado, y es tan importante el hacerlo como la forma de hacerlo. Loa forma idónea es hacer movimientos cortos y circulares, suaves y prestar mucha atención a la fuerza con la que lo haces. Si aprietas mucho puedes padecer en un futuro problemas en las encías. Los dentistas recomiendan el uso de cepillos eléctricos ya que limpian mejor que los convencionales, pero es muy importantes que cambies el cabezal cada tres meses para evitar afecciones periodontales.
Y por favor… visita a tu dentista
En Implanlux siempre aconsejamos a nuestros pacientes sobre los mejores hábitos de salud dental, pero también recomendamos que no dejes tus citas periódicas. A veces una caries, una infección o cualquier tipo de problema es difícil de detectar si no es por parte de un odontólogo, y como se suele decir, y también en el caso de la salud dental, más vale prevenir que curar.
