Una dieta equilibrada y una correcta higiene oral, es fundamental para mantener unos dientes fuertes y buena salud bucodental.
Además de seguir los consejos básicos de higiene dental, que no son otros que el cepillado y el uso de hilo dental después de las comidas, es muy importante que sepamos que nuestra alimentación también puede influir en el nuestro estado general de salud bucodental.
De la misma forma que los alimentos que consumimos diariamente afectan al estado de salud general, también afectan de manera positiva o negativa al estado de nuestros dientes y encías: por ejemplo, ingerir alimentos o bebidas altos en azúcares puede provocarnos caries; la carencia de ciertos nutrientes puede agravarnos cualquier pequeña infección, etc.

¿Cuáles son los mejores alimentos para mantener una buena salud bucocental?
1. Lácteos
El queso ayuda a reforzar la superficie del diente y el yogur lo remineraliza, pero ojo, siempre estamos hablando de productos sin azúcares añadidos.
2. Frutas y verduras
Seguro que habrás escuchado que las manzanas son como un cepillo de dientes natural. Es cierto, y no solo las manzanas, también las zanahorias y el apio tienen un efecto de barrido sobre la placa bacteriana, limpiando los dientes y contribuyendo a que las encías no se inflamen.
Pero no solo este tipo de frutas y verduras son beneficiosos para nuestra dentadura. En general, todas las frutas y verduras, al comerlos, potencian la producción de saliva, por lo que facilitan la eliminación de la placa bacteriana y los restos de comida adheridos a los dientes.
3. Agua
Beber entre 1,5 y 2 litros de agua al día, además de ser muy beneficioso para nuestra salud general, va genial para nuestros dientes, ya que estimula la salivación.
4. Chicles sin azucar y con Xilitol
Igual que en el caso anterior, masticar chicle produce salivación, y por lo tanto, la limpieza de nuestros dientes. Además, el xilitol, un edulcorante natural, tiene importantes efectos contra las caries y las bacterias manteniendo una óptima salud bucodental.
5. Cereales y legumbres
Los alimentos ricos en fibra también promueven la producción de saliva, al exigir un mayor esfuerzo de masticación.
6. Alimentos sin color
Los alimentos excesivamente pigmentados, ya sea pigmento natural o artificial, pueden teñir los dientes. Por eso, es conveniente tomar alimentos como el arroz blanco y las carnes y los pescados blancos.
7. Frutos secos y semillas
Son alimentos ricos en vitaminas y minerales, entre los que destacan el calcio (almendras, avellanas, pistachos). Se recomienda tomarlos naturales y sin azúcar o miel.
8. Té
El té tiene una doble aportación: flúor, para el refuerzo del esmalte, y polifenoles, para combatir las bacterias.
La única pega es que mancha con facilidad los dientes. Sin embargo, con una buena higiene diaria se puede disfrutar de él con total tranquilidad.
¿Qué hace que ciertos alimentos nos produzcan caries?

Existen diferentes factores que influyen en la cariogenicidad de los alimentos, es decir, la capacidad que tienen los alimentos de terminar produciendo caries. Algunos de ellos son:
1. Forma y consistencia
La forma, o estado, del alimento determina la duración o el tiempo en el que el alimento permanecerá en la boca. Los líquidos se eliminan con rapidez y hay poca probabilidad de que queden retenidos en los dientes. Por otro lado, los sólidos, (en especial las galletas, patatas fritas y cereales secos) tienen más posibilidad de introducirse entre los dientes o de quedarse adheridos a ellos.
En cuanto a la consistencia de los alimentos, los de carácter pegajoso, como chuches, frutas deshidratas, caramelos de textura gomosa, etc. favorecen a su adherencia al diente provocando una mayor producción de sarro.
2. Exposición a ciertos alimentos
Cuando un alimento está en la boca durante un rato, la amilasa de la saliva empieza actuar y empieza a deshacer el almidón de los alimentos en azúcar simple. Este azúcar es el alimento de muchas bacterias que tenemos en la boca y que potencialmente pueden ser perjudiciales para nuestra salud bucal.
3. Composición de nutrientes
Dependiendo de la composición del alimento, habrá alimentos que favorecen a la formación de caries o que, al contrario, la prevendrán. Esto es el caso de los productos lácteos. Cuando se consumen con alimentos que tienen un potencial de formar caries, los lácteos regulan el pH de la boca, evitando que sea muy ácido, medio perfecto para el crecimiento de bacterias. Tomar un lácteo de postre puede reducir las posibilidades de formar caries debido a este efecto «amortiguador”.
4. Secuencia y frecuencia de las comidas
Se debe combinar alimentos con capacidad de adherencia a los dientes con alimentos que la eviten.
Por ejemplo, el plátano, aunque sea un alimento muy saludable, contiene hidratos de carbono fermentables, comida de las bacterias que tenemos en la boca. Además, tiene una elevada capacidad de adherencia al diente. En este caso deberíamos acompañarlo, por ejemplo, con agua o la leche.
La frecuencia de las comidas, también influye a la hora de formar caries, puesto que cada vez que se consume un alimento o bebida con potencial de formar caries se activan los mecanismos que promueven su formación.
Alimentos perjudiciales para los dientes
Hay algunos alimentos que debemos evitar, porque son archienemigos de nuestros dientes.
Uno de ellos son las patatas fritas de bolsa, que desgastan el esmalte. Por eso, hay que evitar comerlas, o cuando se consuman, es de especial importancia lavarse bien los dientes después, y, si es posible, utilizar hilo dental para evitar la formación de placa”, recomienda.
Las bebidas carbonatadas son perjudiciales también para la dentadura pues desmineralizan el esmalte, y además, las que contienen azúcares, elevan el riesgo de sufrir caries.
El café y ciertas salsas muy coloreadas, como la soja, el kétchup y el vinagre balsámico pueden teñir nuestro esmalte, así como el vino, que, aunque en pequeñas cantidades es beneficioso para la salud bucal, contiene pigmentos que pueden mancharnos los dientes.
Y por favor… visita a tu dentista
En Implanlux siempre aconsejamos a nuestros pacientes sobre los mejores hábitos de salud dental, pero también recomendamos que no dejes tus citas periódicas. A veces una caries, una infección o cualquier tipo de problema es difícil de detectar si no es por parte de un odontólogo, y como se suele decir, y también en el caso de la salud dental, más vale prevenir que curar.
